El método hamburguesa, también conocido como sándwich de retroalimentación, es una técnica para dar críticas de manera efectiva. Consiste en abrir con un comentario positivo, seguido de una crítica constructiva, y finalizar con otro comentario positivo. Este método permite mantener la motivación del empleado y evitar que se sienta atacado. Inspírate y emprende con esta técnica y haz realidad tus sueños mientras fomentas un ambiente laboral más positivo.
¿Qué es el método hamburguesa?
El método hamburguesa, como su nombre lo sugiere, estructura la retroalimentación como una hamburguesa. Primero, un panecillo de apertura con comentarios positivos. Luego, la carne, que representa la crítica constructiva. Finalmente, otro panecillo de cierre con más comentarios positivos. En palabras de Gema de la Guía, Talent and Development Manager de Pacadar: “Primero, un panecillo de apertura con comentarios positivos. Luego la carne, con la crítica. Y finalmente, otro panecillo de cierre con más comentarios positivos”.
Beneficios del método hamburguesa
Este método permite mantener el equilibrio justo entre la claridad de nuestros argumentos y la crudeza de lo que tenemos que decir. Al iniciar y cerrar con comentarios positivos, se protege la autoestima del receptor y se mantiene su motivación alta. Además, facilita una comunicación más abierta y menos defensiva.
Variaciones culturales del método hamburguesa
En diferentes culturas, el método hamburguesa se adapta de distintas maneras. En Estados Unidos, si tu jefe quiere que rectifiques algo, recibirás una hamburguesa completa: comentario positivo + feedback negativo + comentario positivo. En Japón, es probable que te citen en el despacho y te hablen de lo que te aprecian sin mencionar directamente la crítica. En Alemania, se recibe una retroalimentación directa sin comentarios positivos previos o finales.
Alternativas al método hamburguesa
Existen otras variaciones del método de retroalimentación. Por ejemplo, el método currywurst omite los comentarios positivos y se centra solo en la crítica. Mientras tanto, el método tostada comienza con la crítica y termina con un comentario positivo. La elección del método adecuado puede depender del contexto y de las preferencias culturales de la organización o del equipo.
Cómo implementar el método hamburguesa en tu organización
Para implementar eficazmente el método hamburguesa, es importante formarse y formar al equipo en habilidades de comunicación. Comienza cada feedback con un toque positivo: menciona logros o esfuerzos destacados. Luego, aborda la crítica constructiva de manera clara y específica, y cierra con otro comentario positivo que refuerce la confianza y motivación. Como menciona Gema de la Guía: “Volvemos al toque positivo para finalizar la crítica o feedback negativo. Algo así como «quiero que sepas que seguimos confiando en ti y sabemos que serás capaz de rectificar esto»”.
Palabras finales sobre el método hamburguesa
El método hamburguesa no solo es una técnica efectiva para ofrecer críticas constructivas, sino que también fomenta un ambiente laboral positivo y motivador. La creatividad es el motor del éxito, y con herramientas como esta, los líderes pueden inspirar y guiar a sus equipos hacia mejores resultados. Haz realidad tus sueños adoptando nuevas técnicas de comunicación y observa cómo mejoran las dinámicas en tu lugar de trabajo.